Rankia México Rankia Argentina Rankia Brasil Rankia Chile Rankia Colombia Rankia Czechia Rankia Deutschland Rankia España Rankia France Rankia Indonesia Rankia Italia Rankia Magyarország Rankia Netherlands Rankia Perú Rankia Polska Rankia Portugal Rankia Romania Rankia Türkiye Rankia United Kingdom Rankia USA
Acceder
¡Bienvenido a Rankia México! Volver a Rankia España

Mañana es el gran día de la elección presidencial en Estados Unidos que tanta presión ha puesto sobre México a causa de la aversión del candidato republicano, Donald Trump, que tiene posibilidades reales de ganar. Aquí hemos comentado en reiteradas ocasiones que hay múltiples signos de la decadencia de la otra súper potencia americana, y éste, es uno más.

 

Así votarías mañana (si fueras gringo)

 

En definitiva, que dos pésimos aspirantes a la Casa Blanca como lo son Hillary Clinton –una populista gris con fuertes acusaciones de ilegalidad en el trabajo de su Fundación, de corrupción e incompetencia en el ejercicio de un cargo tan importante como la Secretaría de Estado-, y Donald Trump –un mercantilista, xenófobo y misógino-, sean las dos punteros en la contienda electoral, es otro síntoma de que la Unión Americana es una potencia decadente.


Ese país no se hizo grande con ideas como las que ambos defienden, sino más como las de Gary Johnson, el candidato del Partido Libertario –que va tercero en las encuestas y por el único que votaría si fuera gringo-, quien aspira a alcanzar al menos un 5 por ciento de la votación nacional. Ojalá lo consiga.


Esto permitiría que una tercera opción en el futuro comenzara a ser viable a gran escala, algo que con urgencia los estadounidenses necesitan, si es que aspiran a recuperar la verdadera grandeza de su país. 


Aquella siempre estuvo fundada en el principio de la libertad individual y la propiedad privada, no en el populismo, el Estado benefactor, el aislamiento ni en la falsa “igualdad”. 


Y es que todos podemos llegar a  ser sólo desigualmente ricos, mientras que la igualdad sí es alcanzable, pero sólo en la pobreza.


Ojalá allá y en cada país del mundo entendiéramos que no hay camino de prosperidad que pueda ser dirigido por ningún gobernante –tan corruptos, derrochadores e ineptos casi siempre-, sino que dicha prosperidad se alcanza permitiendo que el natural espíritu empresarial del ser humano, actúe en libertad para crear riqueza, acumularla y con ella generar todavía más.


Por eso es tan importante que en los intercambios, el dinero utilizado sea dinero honesto, sólido, que por su valor sea aceptado por mutuo acuerdo entre las partes, no un falso dinero impuesto por el gobierno según su conveniencia.


La búsqueda de la ganancia personal y la garantía de conservación de lo ganado (propiedad privada) en abierta competencia por la preferencia de los consumidores, es el único incentivo real para la aludida creación de riqueza. Después de todo, ¿quién quiere esforzarse para obtener un beneficio que, una vez conseguido, le sea confiscado bajo el pretexto que sea?


Esta simple explicación debería ser suficiente para echar al bote de la basura las ideas socialistas, que por su propia naturaleza, no pueden conducir hacia otro destino que no sea la miseria y el autoritarismo. No es casual que el 100 por ciento de los experimentos socialistas en el mundo terminen igual.


A pesar de ello, los populistas de izquierdas y derechas regresan siempre con sus mentiras y demagogia –como vemos en el caso de Clinton y Trump-. Con ellas engatusan a la gente con la falsa esperanza de que ellos serán los “buenos”, los “redentores”, la “esperanza” que todos estaban buscando. Pura basura.


Si los políticos fueran la solución a los problemas y carencias de la gente, tendríamos todos la vida resuelta. Ni siquiera necesitaríamos trabajar. Bastaría con sentarnos a esperar que por la “gracia divina” del gobernante, estirando la mano, viviéramos todos en el paraíso donde no hace falta nada.


En este absurdo se encuentran quienes promueven iniciativas como la de una “renta básica” y aberraciones socialistas como las contenidas en el proyecto de “Constitución” de la CDMX.


Así las cosas, pase lo que pase mañana tenemos todos una enorme tarea pendiente: conocer, defender y difundir las ideas de la libertad. Nuestra civilización misma, depende de ello.

1
  1. #1
    09/11/16 07:16

    Guillermo mi suegro, que es oaxaqueño siempre me dijo: el latino acabará siendo el que provoque el hundimiento de USA como la conocemos. Y Es curioso que finalmente haya sido el voto latino el que ha cargado contra Hilaria (corrupción total) y haya ido en favor del que supuestamente iba a perjudicarles. Creo que nunca debemos subestimar la sabiduría de la masa. Me hubiera entristecido una victoria contra Sanders (si, yo como español considero el tejido social necesario) pero contra Hilaria! Está bién pendeja la vieja!!