Los últimos dos meses del año cambian los hábitos de los compradores, especialmente los que se relacionan al consumo de alimentos y bebidas, y todo mundo se sale un poco de la “línea” saludable y financiera.
La dinámica de compra es uno de los cambios más notables de la temporada, esto no significa que el consumidor acuda más veces a las tiendas, pero sí gasta en promedio 9% más por cada ocasión y en promociones el gasto se eleva 5% más que en el resto de los meses, sin superar al verano que sigue siendo la época de oro para las rebajas, según Kantar Worldpanel, especialista global en el comportamiento del consumidor.
El estudio añade que el gasto se incrementa en general, debido al mayor nivel de ingresos que tienen las familias en este periodo, considerando prestaciones como bonos y/o aguinaldo, y que todos los hogares - incluso los de ingresos más bajos- desembolsan al menos 2% ,más de lo que usualmente lo hacen en otros meses.
Lo anterior nos lleva a concluir que, cualquiera que sea el plan que tienes para cerrar el año, estarás gastando más de lo acostumbrado; y eso significa un abuso en mayor o menor medida, para tu rutina financiera. Por ello es importante hacer un chequeo de tu salud económica antes de comenzar a recibir las facturas de diciembre. La diversión nunca está peleada con la previsión, si tienes el panorama claro antes de comenzar la aventura. No esperes a estar en un círculo vicioso todos los años. Analiza cómo y hasta dónde has llevado tu dinero este 2016 y prepara el escenario que está por llegar en unas cuantas semanas.
Detección oportuna en 7 pasos
Detecta a tiempo tus problemas financieros. El diagnóstico oportuno es la mejor manera de poner a salvo tu dinero a largo plazo. Responde este análisis financiero según reflexiones sobre tu balance del año. Cada vez que digas “no”, estarás frente a un asunto por resolver a la brevedad posible.
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¿Estás al corriente con el saldo de tus deudas?
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¿Tienes un presupuesto por mes y lo respetas? / ¿Sabes en qué se va el dinero cada mes?
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¿Podrías sobrevivir en el corto plazo si te quedas sin ingreso? O bien, ¿tienes suficientes ahorros para disponer en caso de emergencia?
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¿Estás bajando el adeudo de tus tarjetas de crédito?
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¿Tienes una inversión en algún instrumento de ahorro?
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¿Tienes un seguro útil, por ejemplo para tu auto o de salud; o sabes qué tipo de seguro te ayudaría realmente a vivir mejor?
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¿Tienes una meta financiera que ya estés en vías de cumplir?
Analiza tus puntos débiles al momento de enfrentar los gastos de fin de año. Las recomendaciones más eficaces para pasar una buena temporada decembrina y un mejor enero incluyen:
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Presupuestar. O lo que es lo mismo, planificar. Organizar los gastos es asegurar que tendrás dinero para solventar los realmente urgentes. Si te funciona la regla más común, úsala: 70-30: asigna 70% de tu dinero para vivienda, alimento, salud, educación y transporte, y el 30% desígnalo al ahorro, esparcimiento y pago de deudas.
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Liquida deudas. Si estás saturado, entonces prioriza las más antiguas y las que están generando intereses más altos, y comienza por saldar esas.
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Reserva e invierte. No puedes comenzar el 2017 sin un fondo de emergencia. Haz que tu meta sea disponer de un respaldo financiero para vivir tranquilo por lo menos durante seis meses en caso de urgencias como desempleo o enfermedad. Aprende a invertir en instrumentos que te den rendimientos superiores a la inflación para que el dinero no pierda su valor con el tiempo.
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Contrata el seguro que realmente uses. No pagues productos financieros que no utilizas, en cambio, aprovecha aquellos que por fuerza debes contratar, por ejemplo, los seguros para auto o seguros para tarjetas de crédito, incluyen beneficios tan diversos seguridad en carretera, seguro contra fraude, ¡y hasta chequeos médicos! No todo es pensar en catástrofes. Estudia y explota al máximo las pólizas.
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Lo importante es que elija aquellos que arrojen. Recuerde que el chequeo se puede realizar cuantas veces sea necesario hasta lograr una buena planeación financiera personal.
