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Las sanciones económicas: elementos básicos y el caso de Rusia

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Desde el comienzo de las hostilidades entre Rusia y Ucrania, los “dimes y diretes” entre los países que defienden la liberación de territorio ucraniano, entre ellos Estados Unidos y la Unión Europea, y el gobierno ruso han fluido sin parar, y ya forman parte de las noticias cotidianas en tiempos recientes.

Específicamente, los defensores han prorrumpido en múltiples exclamaciones de descontento, aunque no han mostrado interés en participar en el conflicto bélico y, por ende, escalar la guerra a mayores dimensiones. 

Sin embargo, el camino elegido por ellos es, claramente, la imposición de diversas sanciones de carácter económico y de movilidad, con el fin de dislocar la economía rusa y de obligar a que desista en su intento por apoderarse de Ucrania.
 
A manera de recordatorio, las medidas económicas punitivas aplicadas a Rusia se clasifican en tres ámbitos: comerciales, financieras y de movilidad personal o viaje. 

En el primer caso, los pro-ucranianos interrumpieron las exportaciones hacia Rusia de 1) artículos y dispositivos tecnológicos diversos, 2) materias primas y bienes intermedios para el sector aeronáutico, aeroespacial y marítimo, 3) bienes bivalentes, empleados en las áreas civil y militar, 4) bienes de lujo; y, por otro lado, estos mismo países ya no han importado ciertos productos provenientes de Rusia, entre ellos, 1) insumos para la generación de energía, principalmente gas y carbón, 2) acero, 3) hierro, 4) fertilizantes, y 5) madera. Como respuesta, el gobierno ruso ha dejado de exportar más de 200 productos a 48 países, que están a favor de Ucrania y de la conclusión del conflicto bélico.

Asimismo, este asunto ha afectado indirectamente a la inversión y operaciones de algunas empresas transnacionales y, en consecuencia, han optado por retirarse del mercado ruso.
 
En materia financiera, las prohibiciones están encaminadas, primero, a la congelación de los activos financieros en Bancos Centrales e instituciones financieras foráneas, entre ellos divisas y oro, cuestión que imposibilita a utilizar sus recursos para el pago de sus obligaciones financieras en moneda extranjera, principalmente deuda gubernamental- principal e intereses denominados en dólares y euros.

Segundo, los gobiernos pro-ucranianos han vetado la compraventa de divisas y transacciones comerciales con dólares y euros, de por medio, con la finalidad de cortar el suministro de moneda extranjera, e imposibilitar que el gobierno recabe estos recursos monetarios tan indispensables para cumplir con parte de sus obligaciones.

Tercero, la mayoría de los bancos comerciales rusos más representativos fueron removidos del sistema SWIFT, que ha impedido que los recursos monetarios lleguen a los vendedores en el extranjero y, por tanto, no se lleven a cabo muchas transacciones diariamente.
 
En el ámbito de la movilidad, tanto el bloque de países que apoyan a Ucrania como la propia Rusia, como una medida retaliatoria, han vetado la entrada, residencia e inversiones de diversas personalidades con alta jerarquía, entre ellos oligarcas, mandatarios, funcionarios, e incluso individuos del medio artístico.

 Un ejemplo claro es la cancelación de las visas doradas a ciertos oligarcas rusos en el Reino Unido, que les otorgaba la facultad de residir y realizar inversiones dentro de este bloque de países. Como una medida no económica adicional, el bloque pro-ucraniano ha impuesto prohibiciones al acceso de noticias difundidas medios de comunicación ruso de propiedad estatal, entre ellas Russia Today (RT) y Sputnik, aduciendo que estos medios difunden propaganda de manera deliberada y crean campañas de desinformación relacionado con el conflicto bélico.

 A manera de resumen, estas son las principales sanciones aplicadas por los aliados del gobierno ucraniano: el Peterson Institute for International Economics, un think-tank estaodunidense, ha compilado todas las sanciones impuestas a Rusia desde los albores de la guerra hasta la actualidad, y se puede consultar en el siguiente enlace: https://www.piie.com/blogs/realtime-economic-issues-watch/russias-war-ukraine-sanctions-timeline
 
En este sentido, ¿Qué son las sanciones económicas? Son un compendio de medidas encaminadas a interrumpir el flujo económico y las transacciones entre economías. De acuerdo con el Foro Económico Mundial, los propósitos de estas medidas son:
 
Disuadir el mal comportamiento, imponer un castigo económico al país objetivo y forzar la rehabilitación o cambio de comportamiento de ese país… Los esfuerzos de sanción son más efectivos cuando se coordinan e implementan multilateralmente con aliados”
 
Los especialistas en el tema consideran las sanciones económicas como una nueva modalidad de guerra, sin llevar a sus pueblos a la vía de las armas, aunque sí afectan la actividad económica de las naciones sancionadas.

En términos geopolíticos, los países prefieren utilizar sanciones económicas que llevar a cabo confrontaciones directas con el fin de disuadir el comportamiento de ciertos países y cambiar su política interior/exterior: en la historia reciente, este fenómeno se ha repetido de manera constante, y los ejemplos más claros son las sanciones impuestas a Irán (energía nuclear), Rusia (toma de Crimea) y China (intereses económicos) en la década de 2010.
 
Así pues, las sanciones económicas se formalizan en un proceso de tres etapas. En la primera fase, un país amenaza a otro con imponer ciertos vetos económicos si no cambia su conducta o actitud ante cierta situación: aquí, el plano es verbal y es más bien una advertencia para el país que será sancionado. 

En la segunda fase, el país ya lanza sus primeras prohibiciones para la nación afectada, y tienen su aplicación en un solo ámbito, o son unidimensionales: aquí, las sanciones no afectan a la economía y, sólo lo hace a ciertos sectores. 

En la tercera fase, el país que sanciona ya impone un compendio de medidas de carácter multidimensional, es decir, que impactan negativamente en la economía en su conjunto, y se le conoce como una guerra económica o guerra comercial. 
 
Cabe señalar que en las fases uno y dos, los países que imponen sanciones pueden detener sus embates si y solo si el país cambia su conducta. En la tercera fase, por otro lado, se detienen las sanciones con el cambio de actitud más la firma de un tratado o pacto para asegurar cierto comportamiento futuro.
 
Como ya se ha señalado, las sanciones económicas se clasifican en comerciales, financieras, de viaje, de inversión, y de otros rubros económicos, como la reducción en la ayuda humanitaria. Asimismo, los principales motivos por los cuales se han ocupado las sanciones económicas, en los últimos tiempos, son para atender problemas de terrorismo, narcotráfico, resolución de conflictos armados, asimetrías económicas, y defensa de los derechos humanos de otros países, primordialmente.

Otra precisión que vale la pena mencionar es que las sanciones económicas las puede imponer un país (v.gr. Estados Unidos), un bloque de países (v.gr. Unión Europea) o una organización internacional (v.gr. ONU). Véase el siguiente diagrama de Venn.
 
Fuente: Council of Foreign Relations.
Fuente: Council of Foreign Relations.

Por otro lado, los críticos en el tema han cuestionado la efectividad de estas medidas punitivas, argumentando que han sido poco exitosas, históricamente hablando, y que no existe una manera real de saber si causaran un daño a las naciones afectadas, la magnitud del mismo y, por ende, si serán efectivas. 
 
Ahora, ¿Las sanciones económicas, impuestas por los países pro-ucranianos, han afectado el desempeño de la economía rusa?, ¿Cuál ha sido la magnitud de este impacto? Para contestar a estas preguntas, se tomarán en cuenta los siguientes elementos. Primero, las exportaciones de combustibles fósiles (gas, petróleo y carbón) de Rusia al mundo no se han visto afectadas en materia de ingresos. 

En este tenor, muchos países de la Unión Europea y Estados Unidos amenazaron con detener el consumo de estos energéticos provenientes de Rusia; sin embargo, solamente Estados Unidos y Japón han reducido sustancialmente su consumo (véase gráfica 1), mientras que la Unión Europea solamente lo ha contraído en 17% -países como Alemania, Italia, Turquía, Francia y Holanda siguen adquiriendo estos insumos de Rusia (véase gráfica 2). 

En el total, 61% del total de combustibles fósiles producidos en Rusia son consumidos por la Unión Europea, por lo que la reducción en el consumo de países ajenos a este bloque no causó gran impacto en sus volúmenes de exportaciones, con una disminución sólo del 15%.
 
Gráfica 1. Fuente: Visual Capitalist.
Gráfica 1. Fuente: Visual Capitalist.

 
 
Gráfica 2. Fuente: Visual Capitalist.
Gráfica 2. Fuente: Visual Capitalist.
 
Además, el ingreso de mayo de 2022 fue 39% mayor que en el mismo periodo del año pasado, subiendo de 633 a 883 millones de euros por día, ya que los precios de exportación han escalado en un 60% en términos anuales, principalmente por una mayor demanda de combustibles fósiles durante el presente año (véase gráfica 3). 

En el desglose, la caída por efecto volumen fue de aproximadamente 200 millones de euros por día, que fue totalmente compensado por el efecto precio, que ascendió a 450 millones de euros por día.
 
Gráfica 3. Fuente: CREA.
Gráfica 3. Fuente: CREA.

Segundo, el gobierno de los Estados Unidos declaró que Rusia se encontraba en default al haber incumplido con el pago durante el periodo de gracia (30 días posterior al impago) de 100 millones de dólares en intereses pagaderos al 27 de mayo.

Al respecto, el Kremlin respondió que el gobierno ruso sí hizo el pago de los intereses y, empero, los inversionistas no recibieron su pago debido al bloqueo en el sistema de pagos, enfatizando su voluntad de hacer el pago y la falta de compromiso por parte de los países que han aplicado estas medidas.

En realidad, el gobierno si cuenta con la capacidad de pago, aunque las sanciones económicas le han impedido disponer de sus recursos monetarios en dólares o euros: esta es la razón por la cual los inversionistas aún no han emprendido acciones legales y demandar ante las cortes internacionales, ya que aún están a la expectativa de recuperar sus inversiones en el corto plazo: incluso, el gobierno ha ofrecido un cambio de condiciones, donde parte de la deuda, principal e intereses, sean pagados en rublos de forma regular. 

Finalmente, los especialistas coinciden que la economía mundial no se vería afectada si el gobierno ruso no pudiese cumplir con sus obligaciones en materia de bonos soberanos.
 
Tercero, las condiciones económicas en Rusia si se han deteriorado, pero no han puesto en jaque al país. La BBC reportó que los supermercados cuentan con un gran inventario de productos nacionales, mientras existe escasez de productos importados. 

En términos de indicadores económicos, el sector de servicios se contrajo ligeramente en mayo, mientras que el sector manufacturero creció en el mismo periodo, ambos en términos anuales; por otro lado, la inflación en mayo fue del 17.1% interanual, en linea con las altas tasas observadas a nivel mundial. 

En este sentido, su economía ha manifestado signos de resiliencia, y esto obedece a dos factores: 1) al aumento sustancial de la tasa de interés de referencia del Banco Central Ruso en marzo y su recorte gradual en los siguientes meses, y 2) a la implementación el control de capitales. Ambas medidas han fortalecido el tipo de cambio, han mantenido la liquidez a niveles preguerra, y han impulsado las actividades económicas locales. 

Hablando de las finanzas del gobierno ruso, los ingresos han superado al gasto durante los cinco primeros meses del año, e incluso han mostrado mejor desempeño que el año pasado (véase figura 4).
 
Gráfica 4. Fuente: CSIS.
Gráfica 4. Fuente: CSIS.

En suma, 1) las sanciones económicas han afectado los sectores secundario y terciario de la economía rusa, aunque han mostrado signos de recuperación en el último periodo, 2) el sector estratégico de combustibles fósiles no se ha visto afectado, incluso han mostrado un mejor desempeño en términos del ingreso, a pesar de la caída del 15% en el volumen de exportación y las amenazas incumplidas por parte de varios países de la Unión Europea, 3) la economía rusa cuenta con los productos necesarios para satisfacer la demanda interna, 4) el gobierno ruso cuenta con la capacidad de pago de sus bonos soberanos, y no ha habido demandas ante tribunales internacionales hasta el momento, 5) las finanzas públicas de gobierno son relativamente saludables y pueden implementar medidas fiscales para impulsar la economía interna, y 6) el Banco Central Ruso aún cuenta con las herramientas de política monetaria para solventar esta tormenta actual. 
 
En conclusión, la economía rusa si ha mostrado signos de debilitamiento ante las prohibiciones, aunque el impacto ha sido muy limitado, y el gobierno cuenta con todo lo necesario, al corte de hoy, para solventar una inminente recesión. Por tanto, el gobierno ruso aún no se ve forzado a detener la incursión al pueblo ucraniano, y se requerirán de medidas más duras para doblegar su actitud presente.
 
Referencias:
 
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