Acceder

Inflación, tasas y tonos a septiembre de 2023

 
A más de tres años del comienzo de la pandemia por COVID 19 y más de un año de distancia del inicio de las hostilidades entre Rusia y Ucrania, el andar económico no ha sido sencillo y estos “shocks” han impactado en las variables económicas, entre ellas la inflación. 

Si bien lo peor ya ha transcurrido, existe aún la preocupación por los Bancos Centrales (BCs) en este rubro debido a su evolución en los últimos, que no ha satisfecho por completo las expectativas de sus autoridades. A pesar de sus esfuerzos en materia monetaria, las presiones inflacionarias no han cedido completamente con base en la evidencia. 
 
Y los números no mienten. La inflación general de prácticamente todos los países no ha convergido a sus niveles “saludables”, si bien ya hay una tendencia hacia la baja. Otro tema importante es la trayectoria que ha seguido en los últimos meses ya el descenso no ha sido pronunciado, como se esperaba, y el ritmo de “desinflación” es cada vez más lento.  

De acuerdo con estimaciones recientes del Fondo Monetario Internacional, los pronósticos son cada vez “menos” optimistas, y ahora se espera que la inflación mundial llegue al 4% hasta el cuarto trimestre de 2024 (julio 2023) vs el mismo nivel en el cuarto trimestre de 2023 (abril 2022). Para mayor claridad, véase la gráfica 1. 
 
Gráfica 1. Inflación general mundial, números recientes y pronosticados. Fuente: World Economic Outlook, July 2023.
Gráfica 1. Inflación general mundial, números recientes y pronosticados. Fuente: World Economic Outlook, July 2023.


Con base en lo anterior, los analistas, académicos y expertos en temas económicos, cada vez, están más convencidos de que las tasas de interés objetivo de los BCs permanecerán altas por más tiempo, y que, por ende, los recortes en ellas no serán una realidad en el corto plazo.

Asimismo, el Jackson Hole Symposyum demostró la postura de los BCs en torno a esta variable que es mantener la cautela, seguir con “mano dura” y volver a ser agresivos si hay indicios de que se mantenga o suba la inflación muy por encima de las metas establecidas. Y una advertencia: no tomar decisiones apresuradas en política monetaria. 
 
En términos del tono, el nivel general en el espectro se ubica más del lado “hawkish” que “dovish”. Las principales autoridades monetarias coinciden que el cambio de tono dependerá de la evolución de las cifras económicas, y han hecho el llamado a que se debe ser cuidadoso con los movimientos en las tasas de interés, sobre todo no quedar cortos y no “apagar” el fuego inflacionario. 

Otro punto coincidente es el llamado a seguir luchando en contra de la inflación y que este fatídico episodio aún dista de haberse acabado. Comparado con meses anterior, el tono es ligeramente menos “hawkish” pero no se descarta que vuelva a ser si las circunstancias lo exigen. 
 
En Estados Unidos, la Reserva Federal (FED) aumentó su tasa de interés objetivo a un rango de 5.25%-5.50%, retomando el camino de su subida en tasas después de una pausa en la decisión anterior. En el ámbito de la inflación, el último dato -3.2% general en julio- representó un ligero retroceso al dato anterior-3.0% en junio- y, empero, en línea con lo pronosticado con los especialistas. Un dato que no mejora es la inflación subyacente que aún sigue en niveles altos, 4.7%, y que sigue poniendo presión en los precios de la economía estadounidense.

Recientemente, la cabeza de la FED de Nueva York, John Williams, mencionó que la política monetaria está en el lugar adecuado. Asimismo, la representante de la FED en Dallas, Lorie Logan, señaló que otra pausa sería lo adecuado para la siguiente reunión, y no está convencida de que la lucha haya terminado. Por tanto, el tono es de cautela hacia “hawkish”. 
 
Para México, el Banco de México (BANXICO) decidió pausar sus incrementos y la tasa de referencia sigue en 11.25%, y destacó que el escenario inflacionario mantiene su complejidad. En términos de inflación, se registraron tasas del 4.64% general y 6.08% subyacente, un panorama similar a Estados Unidos donde hay bajas desde sus picos en meses anteriores, aunque presiones del lado de los alimentos y energéticos. 

En términos de expectativas, estas cifras fueron menores a las expectativas de la encuesta de BANXICO, mostrando una ligera mejoría y buenas noticias para la economía mexicana. En este sentido, la gobernadora de este organismo, Victoria Rodríguez, mencionó que no está contemplado un recorte en las tasas de interés y se espera que se consolide una posición descendente. Entonces, el tono es poco menos “hawkish” que la FED, pero a la expectativa de la evolución de los precios. 
 
Y, ¿qué pasa en la Unión Europea? Para el Banco Central Europeo (BCE), la cuestión de la política monetaria no es tan sencilla. La última decisión de política monetaria fue un aumento a 4.25% a la tasa objetivo principal, que continua con la trayectoria ascendente. A pesar de los esfuerzos en materia monetaria, la inflación en el bloque no disminuyó en agosto y se mantuvo en 5.3%, principalmente impulsado por el costo de los energéticos. La inflación subyacente disminuyó ligeramente a 5.3% vs 5.5% del mes pasado. 

Otra mala noticia es el crecimiento económico: su principal economía, Alemania, ha registrado un bajo desempeño durante los últimos tres trimestres consecutivos y las más recientes encuestas de la industria y del consumidor para este bloque no muestran señales positivas y se espera un menor PIB para los países miembros. En estos términos, Christine Lagarde, la presidenta del ECB, mencionó que mantedran una mentalidad abierta de pausar o aumentar, y las decisiones se evaluarán en cada junta.

El reto, sin duda, es conducir la política monetaria sin provocar una recesión o impacto económico importante. 

En resumen, la balanza sigue del lado del “hawkish” aunque en un menor grado y prevalece la cautela. En este sentido, hay incertidumbre sobre la evolución futura de política monetaria de los BCs ante el escenario complejo en materia de inflación. En cuanto a la evidencia, los datos sugieren que la inflación sigue a la baja, pero existen todavía riesgos ya que la inflación no subyacente sigue por encima de las expectativas y posiblemente esté presionando a la general. 

En respuesta, los BCs no han bajado la guardia y mantienen su mano dura, reflejada en los altos niveles de la tasa de interés. Finalmente, el escenario para la Unión Europea es más complejo ya que tendrán que lidiar con mayores daños económicos a los esperados y buscarán tomar decisiones para disminuir este impacto adverso; mientras que para México y Estados Unidos quizás no haya afectaciones significativas. 
 
Referencias: 
 
¿Te ha gustado mi artículo?
Si quieres saber más y estar al día de mis reflexiones, suscríbete a mi blog y sé el primero en recibir las nuevas publicaciones en tu correo electrónico
Accede a Rankia
¡Sé el primero en comentar!