Comprar casa en México no es para todos los sueldos, ni para todas las condiciones laborales, y quienes la “tienen más fácil” por así decirlo son los trabajadores formales que pueden comprobar ingresos, lo cual a su vez es de mucha facilidad para el sistema financiero e hipotecario, pues de esa manera los inversionistas pueden tener más certeza si el deudor puede o no pagar el crédito hipotecario que usará para comprar casa. La otra cara de la moneda es que en México hay una cantidad importante de trabajadores independientes que tienen buen nivel de ingresos, ya sea como trabajadores eventuales o en honorarios, lo cual no les permite comprobar ingresos, sin embargo existen opciones para que ellos puedan comprar casa.
Según cifras oficiales, en México durante 2017 las personas informales con capacidad de usar un banco se dividen de esta manera:
- Las que pertenecen a la Tasa de Informalidad Laboral son el 57.2% de toda la población ocupada del país y son aquellas que no tienen seguro social pero son contratados por empresas legales.
- Luego están los que pertenecen a la Tasa de Ocupación en el Sector Informal que son las personas que tienen un empleo en actividades no agropecuarias, en empresas que no llevan contabilidad y que más bien utilizan recursos del hogar o de alguien que dirige la operación sin ser una empresa constituida (formal). Ellos son el 26.8% de la población ocupada.
Las cifras anteriores significan que al menos 6 de cada 10 personas que trabajan en México no son sujetos de servicios financieros como las hipotecas, estamos hablando de taxistas, estilistas, comerciantes, etcétera, que tienen la capacidad de pagar una vivienda, pero al no tener la manera de comprobar ingresos no son sujetos de crédito.
Bueno pues esta barrera cada vez se está derrumbando más, pues poco a poco la banca está volteando a ver a este tipo de trabajadores con su necesidad de adquirir una vivienda y su capacidad económica para lograrlo. En este sentido, los bancos y las empresas financieras están manejando diferentes maneras para demostrar la capacidad de pago. A continuación hablaremos de cada una de las opciones que existen para que quienes no puedan comprobar ingresos puedan comprar una casa.
Comprar casa sin comprobar ingresos - Esquema de ahorro
Consiste en ahorrar una cantidad mensual y fija en una cuenta de banco durante máximo 24 meses, así se demuestra tener una capacidad de pago y al mismo tiempo ese ahorro sirve para pagar el enganche de tu casa.
Comprar casa sin comprobar ingresos - Renta con opción a compra
En este plan firmas un contrato de arrendamiento donde, además de estar especificada la mensualidad de la renta, también se especifique la opción a compra. En estos contratos generalmente la cantidad que pagas de renta es la misma que quedará como mensualidad a pagar por la hipoteca.
Comprar casa sin comprobar ingresos – por buen pago
Aquí para que el banco se dé cuenta de la capacidad de pago, quien desea el crédito debe demostrar con estados de cuenta que ha pagado otros créditos por mensualidades similares a la que pagarías por un crédito de vivienda.
Comprar casa sin comprobar ingresos – por renta cumplida
Hay otro esquema que ya no se utiliza tanto, pero lo mencionaremos, consiste en contar con contrato de arrendamiento, recibos de pago y demostrarle a la institución de crédito que se ha pagado la renta en tiempo y forma, eso sirve para demostrar capacidad de pago.
Comprar casa sin comprobar ingresos – Por medio de la Sociedad Hipotecaria Federal
La Sociedad Hipotecaria Federal (SHF) opera un producto llamado “Crediferente” que es para personas que no tienen IMSS ni ISSSTE. Aquí la SHF no hace el trámite directamente y más apoya a las instituciones de crédito para que ellos otorgar los créditos y los administren.
Bajo este esquema se debe contar con al menos el 10% del enganche del inmueble, el préstamo es de hasta $937,941 y el plazo a pagar está entre los cinco y 25 años, los ingresos se demuestran con los esquemas antes descritos.
Comprar casa sin comprobar ingresos – Ahorra SIF con Bansefi
En este esquema la persona que no puede demostrar total o parcialmente sus ingresos, hace un ahorro (de 6, 9 o 12 meses), cuando el periodo de ahorro termina, Bansefi proporciona un certificado que respalda la liquidez de quien quiere un crédito hipotecario. Se debe demostrar un ingreso mensual de al menos cinco salarios mínimos incluyendo los ingresos del cónyuge.
El monto del crédito está entre 50 mil y 500 mil UDIS (entre $239,176.5 y $2,391,764.52).
Ahora ya sabes que si no tienes forma de comprobar ingresos existen opciones en los bancos para poder usar el sistema financiero y comprar una cada o departamento, lo púnico que necesitas es disciplina financiera, porque la realidad es que ´casi cualquiera podría usar estos mecanismos para obtener un crédito hipotecario.
