En febrero pasado, comentamos en este blog la nota en exclusiva sobre la “recomendación” que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) hizo al Banco de México (Banxico), para que realizara una inspección física de las 100 toneladas de oro de las reservas internacionales, que el Instituto Central adquirió en 2011.
Hace más de dos años, el Banco de México (Banxico) realizó una compra histórica de 100 toneladas del metal en el primer trimestre de 2011; saltando al escenario de los grandes Bancos Centrales que desde el año 2009 se habían convertido en compradores netos de oro para diversificar sus reservas, fuera de divisas como el dólar de EEUU, el euro o el yen, entre otras.
La política trata de quedar bien con todos. Gusta de ser el centro de atención, que la amen, que la aplaudan, aunque para ello tenga que quebrantar muy a menudo el estado de Derecho y las leyes inmutables de la economía, su gemela. A ésta la oprime desdeñando sus principios en aras, se supone, de mantener el orden y la “justicia” sociales. Un costo muy alto que no obstante, se paga después.
Este viernes, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) hizo un anuncio que sorprendió a propios y extraños, al reducir su objetivo de Tasa de Interés Interbancaria a un día, a 3.75 desde el 4 por ciento en que se encontraba desde marzo pasado.
El caso de la manipulación del mercado del oro es uno de los más importantes, sin embargo todavía permanece en la sombra y Banco de Inglaterra y el oro aún no se ha destapado como otros escándalos, por ejemplo el que ocurrió el año pasado con la tasa interbancaria Líbor (London Interbank Offered Rate).