Barriles entre fronteras: el petróleo como termómetro de la tensión global.

Barriles entre fronteras: el petróleo como termómetro de la tensión global.

Tras una semana de alta tensión en los mercados, el precio del petróleo Brent mostró una nueva escalada que lo llevó a cotizarse en 77.20 dólares por barril, un movimiento que llama la atención por su cercanía a los niveles que presentó en los primeros días del año. En el artículo anterior, publicado el 16 de junio, se había señalado cómo los precios del crudo se habían estabilizado en los 75.60 dólares tras el ataque preventivo de Israel a Irán. Hoy, apenas unos días después, los mercados responden nuevamente a un contexto aún más complejo y delicado.

El pasado 21 de junio, Estados Unidos llevó a cabo un ataque aéreo sobre tres instalaciones nucleares estratégicas ubicadas en territorio iraní. Este hecho, más allá de su impacto geopolítico, reavivó la incertidumbre en los mercados energéticos, pues Irán representa una pieza clave dentro del sistema petrolero global. La reacción inmediata fue visible en el alza del Brent, que retoma fuerza justo cuando la atención del mundo está puesta en la posibilidad de una respuesta contundente por parte de Irán. No se trata solo de un nuevo repunte técnico, sino de un reflejo del nerviosismo colectivo que rodea a los inversionistas.

A diferencia de movimientos pasados, esta semana se percibe un cambio en el ánimo general. Ya no se habla únicamente de volatilidad, sino de un temor genuino a una escalada que pueda afectar directamente las rutas energéticas globales. No es fácil anticipar cómo reaccionará el precio del crudo en los próximos días, pero lo cierto es que este tipo de eventos obligan a los participantes del mercado a mantenerse en alerta. Desde fondos institucionales hasta inversores minoristas, todos están a la expectativa. Y aunque es probable que los precios sigan subiendo en el corto plazo, el riesgo geopolítico se vuelve cada vez más difícil de descontar.

Para Alexandro Nava, asesor financiero Grupo Financiero Inbursa, comparte lo siguiente:

Este tipo de escenarios, por más que representen oportunidades de rendimiento para ciertos inversionistas, no pueden analizarse con indiferencia. Detrás de cada alza hay un trasfondo de dolor, decisiones políticas y tragedias humanas. La historia nos enseña que los conflictos bélicos dejan huellas no sólo en los gráficos, sino en generaciones enteras. Si bien los mercados seguirán reaccionando como lo han hecho siempre, no se puede perder de vista que lo que para unos representa rentabilidad, para otros ha significado pérdida, desplazamiento y sangre. Que nunca se nos olvide que la paz, como la salud, también es una forma de riqueza.

-Luis Alberto Téllez

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