Invertirá en activos de deuda, principalmente en dólares y en menor proporción en otras monedas, mismos que tenderán a ser de mediano plazo, como los bonos de tasa fija gubernamentales, instituciones de crédito, así como empresas privadas en todos sus plazos, instrumentos de tasa revisable emitidos por agencias gubernamentales como por corporativos privados, certificados de la Tesorería, en instrumentos estructurados y derivados.