La cobertura y el arbitraje juegan un papel importante en las finanzas, la economía y las inversiones. Básicamente, la cobertura implica el uso de más de una apuesta concurrente en direcciones opuestas en un intento de limitar el riesgo de una pérdida de inversión grave. Mientras tanto, el arbitraje es la práctica de negociar una diferencia de precio entre más de un mercado por el mismo bien en un intento de sacar provecho del desequilibrio.
Diferencias entre cobertura y arbitraje
Cada transacción involucra dos tipos de operaciones competitivas: apuesta corta versus apuesta larga (cobertura) y compra versus venta (arbitraje). Ambos son utilizados por inversionistas que operan en entornos de mercado volátiles y dinámicos. Aparte de estas dos similitudes, sin embargo, son técnicas muy diferentes que se utilizan para fines específicos.
¿Cuándo se utiliza el arbitraje en el trading?
El arbitraje implica tanto una compra como una venta en un período de tiempo muy corto. Si un bien se vende por $ 100 en un mercado y $ 108 en otro, un comerciante inteligente podría comprar dicho artículo de $ 100 y luego venderlo en el otro mercado por $ 108. El comerciante disfruta de una rentabilidad sin riesgo del ocho por ciento ($ 8 / $ 100), menos cualquier comisión, transporte o gastos varios.
Con la proliferación de datos de alta velocidad y el acceso a información de precios constante, el arbitraje es mucho más difícil en los mercados financieros de lo que solía ser. Aún así, las oportunidades de arbitraje se pueden encontrar en varios tipos de mercados, tales como divisas, bonos, futuros y a veces en acciones.
¿Cuándo se usa la cobertura en el trading?
La cobertura no es la búsqueda de intercambios libres de riesgo. En cambio, es un intento de reducir los riesgos conocidos durante el comercio interior y exterior. Los operadores optan por contratos de opciones, contratos forward, swaps y derivados para comprar posiciones opuestas al mercado. Al apostar contra movimientos ascendentes y descendentes, el coberturista puede asegurar una cierta cantidad de ganancia o pérdida reducida en una operación.
La cobertura puede tener lugar en casi cualquier lugar, pero se ha convertido en un aspecto particularmente importante de los mercados financieros, la gestión empresarial y el trading. Al igual que cualquier otro comercio de riesgo-recompensa, la cobertura da como resultado menores rendimientos para la parte involucrada, pero puede ofrecer una protección significativa contra el riesgo bajista o alcista de un activo subyacente.