Por desgracia en México, 65% de las micro y pequeñas empresas mueren antes de cumplir 5 años y en promedio su esperanza de vida es tan solo de casi 8 años (en 2015 era de casi 7), las principales razones por las cuales las microempresas mexicanas se acaban en este tiempo es porque no cuentan con un proyecto viable y porque carecen de financiamiento, pero en algunos casos también la falta de un seguro hace que un imprevisto acabe con la inversión y patrimonio de sus dueños, de modo que asegurar la empresa, por ejemplo, contra desastres naturales debería estar contemplado dentro de los gastos.
Proteger la empresa debe ser uno de los temas principales de la misma, pues solemos pensar que cuando la empresa ya ha sobrepasado los 5 o los 10 años es más fuerte y menos vulnerable a los estímulos que puedan hacerla enfermar y morir. La realidad es que según información del Inegi se trata de todo lo contrario, es decir, una empresa que cumple más años tiene una tasa de mortalidad más alta. Veamos en la siguiente tabla la tasa de mortalidad de las empresas mexicanas según su edad:
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EDAD DE LA EMPRESA |
PROBABILIDAD DE MUERTE |
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10 años |
76% |
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15 años |
82% |
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20 años |
86% |
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25 años |
89% |
Lo que revelan estos números es que apenas 11% de las empresas logra la supervivencia y pasar a la siguiente generación, apenas ese porcentaje obtiene éxito y se queda en la mente de los consumidores.
¿Por qué fracasan y mueren la mayoría de las microempresas mexicanas?
Tiene que ver principalmente con dos elementos que están ausentes desde el nacimiento de la empresa y uno de ellos debe estar presente durante toda la vida del negocio:
- Ausencia de un plan de negocios: este plan es fundamental para saber hacer un negocio rentable, pues la sola idea puede prometer mucho y este plan pule todas las áreas y generalmente ahí surgen las modificaciones necesarias que hay que hacer para que sea un verdadero negocio.
- Tener un modelo de ingresos que le de viabilidad financiera a la empresa. El modelo de ingresos debe estar presente durante toda la vida del negocio o empresa.
Debemos tener clara la importancia de las MiPyMes y PyMes en México, ya que de todas las empresas que tenemos, no más de 5% son empresas transnacionales o grandes, de modo que prácticamente alrededor de un 95% de MiPyMes y PyMes son las que representan la economía de México. En resumen somos una incubadora de micros, pequeños y medianos negocios por tanto es importante capacitarlas, darles acceso al financiamiento y otorgarles estímulos fiscales.
¿Y cómo anda América Latina?
La región prácticamente está en los mismos números con un índice alto de mortalidad en empresas de medianas hacia abajo. Revisando estadísticas de diferentes países se pueden ver coincidencias que revelan que prácticamente entre el 70 y 80% de micro y pequeñas empresas quiebran antes del primer año, y de las que quedan vivas un 70% llegan a los 5 años.
¿Cómo evitar que la empresa o negocio muera?
- Hay que tener une estrategia de negocio clara.
- Se debe contar con una oferta de valor.
- Hay que definir o segmentar a los clientes.
- Temer una estrategia que de soluciones a las necesidades del mercado.
- Debe ser manejada como empresa y no como un negocio. La diferencia radica en que una empresa trabaja con y sin el dueño, mientras que un negocio depende de la presencia física del dueño o fundador para poder operar. Manejarla como empresa obliga a formar estructuras de personal, procedimientos y manuales y ahí surgen elementos y cambios que son necesarios hacer.
- Implementar estrategias de marketing y no verlas como un gasto sino como una inversión.
- Medir, medir y medir, pues como se dice en la administración “algo que no es medible no es mejorable”. Se tiene que medir la gestión, los gastos, los ingresos, evaluar las políticas y procesos para llegar a la cultura de “mejores prácticas”.
- Hacer análisis estratégico, ¿qué quiere decir esto? se trata de hacer lo que llaman “inteligencia de negocio”: revisión de la empresa, su entorno, revisar y evaluar a la competencia, identificar tendencias del mercado, compararse con otros modelos exitosos para aplicarlos, hacer innovación y hacer alianzas.
- Establecer métricas del negocio, las cuales se obtienen de información del desempeño, ello permite tomar decisiones.
10. Tener control financiero para hacer una administración eficiente. Ello involucra:
- Seleccionar al personal correcto.
- Tener información actualizada para tomar decisiones.
- No todo es vender, vender y vender. Muchas veces en el afán de sólo vender no se consideran tiempos de producción, costos estimados ni la rentabilidad, y es por ello que a veces al calor de la venta el negocio salió más caro que lo que se va a ganar.
- Hay que tener el perfil de los puestos de trabajo bien definidos, pues cada nivel de la organización requiere talento y responsabilidades específicas.
- Se deben tener claros los objetivos de la empresa.
- Tener un programa de incentivos.
- Tener indicadores de desempeño claros.
- Ofrecer capacitación y desarrollo organizacional.
- Contar con presupuesto para atraer talento.
- Los líderes deben tomar de decisiones y trabajar en equipo.
- El director o fundador no debe estar dedicado a la operación, ello hace que pierda el foco, su labor es pensar, planear, prever riesgos del negocio y plantear soluciones ante posibles adversidades.
- Poner atención a los números y vigilar el presupuesto para identificar desviaciones y corregirlas.
- Velocidad en el negocio, es decir, se debe actuar a la par de los cambios teniendo dinamismo, toma de decisiones acertadas, hacer estrategias y tener diferentes canales de venta.
