
Si tienes inversiones fuera de México, como acciones, ETFs o cuentas remuneradas, necesitas saber cómo declarar correctamente esos ingresos ante el SAT. Aquí te explico qué debes considerar al momento de reportarlos en tu declaración anual, cómo acreditar impuestos pagados en el extranjero y qué hacer si esos recursos nunca los habías reportado.
¿Qué pasa si eres residente en México y tienes inversiones fuera?
Si eres persona física residente fiscal en México y tienes inversiones activas en el extranjero, estás obligado a declarar los rendimientos obtenidos en tu Declaración Anual del ISR, que se presenta cada año en abril.
Ojo: no tienes que pagar impuestos por el simple hecho de invertir o abrir una cuenta fuera del país. El ISR solo aplica sobre las ganancias que generes, ya sea por intereses, dividendos, plusvalías o venta de activos.
Ojo: no tienes que pagar impuestos por el simple hecho de invertir o abrir una cuenta fuera del país. El ISR solo aplica sobre las ganancias que generes, ya sea por intereses, dividendos, plusvalías o venta de activos.
¿Cuándo se reportan esas ganancias?
Las utilidades que generes en el extranjero no se declaran en el momento en que ocurren, sino que se incluyen en tu Declaración Anual de ISR, correspondiente al ejercicio fiscal en el que obtuviste el ingreso.
Por ejemplo, si vendiste acciones con ganancia o recibiste dividendos durante el año, ese rendimiento se reporta de forma acumulada en tu declaración anual como parte de tus ingresos por inversiones.
Y si al obtener esos ingresos te retuvieron impuestos fuera de México (por ejemplo, en EE.UU. o Europa), puedes acreditar ese impuesto contra el que debas pagar aquí, siempre que cuentes con la documentación fiscal necesaria que lo respalde.
Por ejemplo, si vendiste acciones con ganancia o recibiste dividendos durante el año, ese rendimiento se reporta de forma acumulada en tu declaración anual como parte de tus ingresos por inversiones.
Y si al obtener esos ingresos te retuvieron impuestos fuera de México (por ejemplo, en EE.UU. o Europa), puedes acreditar ese impuesto contra el que debas pagar aquí, siempre que cuentes con la documentación fiscal necesaria que lo respalde.
¿Y si nunca los reporté y quiero repatriar el dinero?
Si tienes recursos en el extranjero que nunca reportaste al SAT, ya sea porque lo abriste desde joven, no sabías cómo declarar o simplemente lo fuiste dejando, lo más recomendable es regularizarte antes de repatriarlos. De lo contrario, podrías enfrentarte a sanciones por omisión de ingresos.
Dependiendo del caso, es posible hacerlo vía complementarias voluntarias, o incluso acudir a programas de repatriación (si el SAT activa alguno).
Dependiendo del caso, es posible hacerlo vía complementarias voluntarias, o incluso acudir a programas de repatriación (si el SAT activa alguno).
¿Cómo se calcula el impuesto por inversiones en el extranjero?
Al momento de calcular el ISR por inversiones realizadas fuera de México, hay varios elementos que debes considerar para determinar correctamente el monto gravable. Entre ellos están:
- Intereses generados
- Ganancias o pérdidas en la venta de activos
- Ajuste por inflación
- Pérdidas fiscales
- Ganancias o pérdidas cambiarias, dependiendo si operaste en dólares, euros u otra divisa
Con base en estos factores, se determina la utilidad fiscal y, posteriormente, el impuesto sobre la renta aplicable al ejercicio.
Estos cálculos deben hacerse utilizando los estados de cuenta mensuales o anuales que te proporcione la institución financiera extranjera con la que inviertes (como brokers internacionales o plataformas digitales).
En el pasado existían esquemas que permitían pagar este impuesto de forma anónima, pero eso ya no es posible. Hoy, la única forma correcta es integrar los ingresos por inversiones extranjeras a tu declaración anual, sumándolos al resto de tus percepciones del año.
Estos cálculos deben hacerse utilizando los estados de cuenta mensuales o anuales que te proporcione la institución financiera extranjera con la que inviertes (como brokers internacionales o plataformas digitales).
En el pasado existían esquemas que permitían pagar este impuesto de forma anónima, pero eso ya no es posible. Hoy, la única forma correcta es integrar los ingresos por inversiones extranjeras a tu declaración anual, sumándolos al resto de tus percepciones del año.
¿Existe algún riesgo por declarar inversiones extranjeras?
Este es un punto que suele generar dudas, pero hay que dejarlo claro: no hay ningún riesgo por declarar ingresos de inversiones en el extranjero. Todo lo contrario: hacerlo correctamente te protege ante posibles observaciones del SAT.
Tu declaración solo refleja los rendimientos obtenidos. No estás obligado a informar el monto del capital invertido ni a detallar en qué instrumento estás posicionado. Tampoco se pide el número de cuenta ni el país de origen, siempre que no esté considerado como jurisdicción de riesgo.
Tu declaración solo refleja los rendimientos obtenidos. No estás obligado a informar el monto del capital invertido ni a detallar en qué instrumento estás posicionado. Tampoco se pide el número de cuenta ni el país de origen, siempre que no esté considerado como jurisdicción de riesgo.
¿Qué pasa si regreso mis inversiones del extranjero a México?
Si decidiste repatriar los rendimientos de tus inversiones en el extranjero, es decir, traer ese dinero de vuelta al país, debes declarar esos ingresos ante el SAT de forma correcta y oportuna.
Este proceso aplica tanto para personas físicas como morales residentes en México, e incluso para extranjeros con establecimiento permanente en el país, siempre que hayan generado ingresos por inversiones mantenidas fuera de territorio nacional.
Este proceso aplica tanto para personas físicas como morales residentes en México, e incluso para extranjeros con establecimiento permanente en el país, siempre que hayan generado ingresos por inversiones mantenidas fuera de territorio nacional.
¿Cómo funciona la repatriación de inversiones?
Aunque en años anteriores existieron programas especiales para facilitar el retorno de capitales, actualmente la repatriación de inversiones sigue un esquema fiscal ordinario. Es decir:
- Se debe pagar el ISR correspondiente a los rendimientos obtenidos
- Este pago debe hacerse en un plazo corto después de que el dinero regresa a México
- Y se utiliza una declaración específica para reportar estos ingresos como parte del total anual
El SAT habilita medios digitales para presentar este tipo de declaraciones, aunque no siempre están bajo un nombre específico o en una sección destacada, así que es recomendable hacerlo a través de tu cuenta en el portal del SAT con asesoría fiscal si es necesario.
¿Cuáles son los requisitos clave?
Para que el retorno sea correcto desde el punto de vista fiscal:
- Los recursos deben ser efectivamente traídos a México (es decir, depositados en una cuenta bancaria mexicana)
- Debes contar con soporte documental de la inversión original y de los rendimientos
- El ISR debe cubrirse dentro del plazo legal una vez que repatías los fondos
Este tipo de regularización es perfectamente válida y es una forma de poner al día tus obligaciones fiscales, sobre todo si tenías inversiones no declaradas previamente.
Preguntas frecuentes
Sí. El hecho de que los rendimientos permanezcan en el extranjero no te exime de declararlos. Como residente fiscal en México, estás obligado a reportar todos tus ingresos mundiales, sin importar dónde estén depositados.
Aunque no retires el dinero, si tus inversiones generaron intereses, dividendos o realizaste operaciones con ganancia, esos rendimientos deben declararse. Reinvertir no elimina la obligación fiscal.
No. El SAT no exige que declares el número de cuenta, nombre del broker o país donde están tus inversiones. Lo que importa es que declares los ingresos generados, no el capital ni los detalles operativos.