En México las ventas a crédito funcionan muy bien porque con ese mecanismo de pago la gente compra un número importante de mercancías. No es en vano que, por ejemplo, las ventas a meses sin intereses funcionen muy bien en épocas de diciembre o durante El Buen Fin, pero ¿cuál es la tarjeta de crédito favorita y la que más usan los mexicanos?
Según los datos de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2021:
- Tarjeta departamental: en 2018, 19% de la población; en 2021, 20% de la población.
- Tarjeta de crédito bancaria: 11% en ambos años.
- Crédito hipotecario: 2018, 7%; 2021, 6%.
- Crédito personal: 2018, 3%; 2021, 4%.
- Crédito automotriz: 2018, 1%; 2021, 2%.
- Crédito grupal o comunal, 4.2% (2018).
- Crédito de Nómina: 2018, 2%; 2021, 2%.
Lo anterior refleja que los mexicanos se endeudan y financian más sus compras con las tarjetas departamentales, en ese caso las compras que hacen son por bienes no tan duraderos como ropa, juguetes u electrónicos, en contraste vemos que en México hay menos crédito de bienes duraderos como hipotecas o financiamiento automotriz.
Al ser el tipo de tarjeta más contratada debes saber que como operan bajo una regulación comercial y no financiera, la dependencia encargada de vigilarlas y a la cual se deben presentar las reclamaciones es la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

Ventajas de las tarjetas departamentales
- La principal oferta son los pagos a meses sin intereses que normalmente son a 6, 9, 12 y 18 meses, y a veces a 20 meses sin intereses.
- Cuando se paga a tiempo, la tienda aumenta la línea de crédito.
- Algunas ofrecen descuentos en la primera compra.
- No tienen cobros de anualidad o apertura de crédito.
- Ofrecen seguros (con un costo extra).
Más caras que las tarjetas bancarias
Las tarjetas departamentales son un éxito a pesar de que son más caras que las tarjetas bancarias. De acuerdo con información oficial del Banco de México y de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), los bancos cobran por sus tarjetas clásicas una tasa promedio de entre 28 y 65%, mientras que las departamentales pueden manejan una tasa mínima de 70% anual.
Pese a su alto precio resultan atractivas por los descuentos, los programas de lealtad y las ofertas que ofrecen, los cuales son muy convenientes, pero hay que saberlos controlas para no caer en sobreendeudamiento.